El rosa es el nuevo blanco para las novias. Los códigos tradicionales se reinventan y el rosa empolvado se consolida como el color favorito de las novias más románticas. El nuevo color para pasar por el altar es sin duda el rosa.
El blanco es por tradición el color de los vestidos de novia, pero ¿sabemos cuál es el origen de esta tradición que todas seguimos sin cuestionarnos por qué? La tradición tiene su origen en la época victoriana. En esta época cualquier color podía ser el elegido para el vestido de novia, a excepción del negro (asociado al luto) y el rojo (al libertinaje). Fue en 1850 cuando la Reina Victoria de Inglaterra, un referente de moda, eligió el blanco para su boda, y éste comenzó a ser imitado por todas las mujeres en Europa, y desde entonces parece haberse convertido en el único color posible para lucirse en el gran día.
Ahora es el momento de romper con convencionalismos y elegir el color que más nos guste para el día más feliz de nuestra vida. El rosa es un color excepcional y muy romántico. Y la primavera es la estación idónea para celebrar una boda llena de romanticismo con este dulce color.
Rosa Clará ya marcó esta ruptura con el clásico blanco en su colección a finales del año pasado presentando increíbles diseños en azul y rosa. Ahora la moda nos da el impulso que necesitábamos para vernos como la princesa que soñamos ser el día de nuestra boda.
Vestido de novia diseñado por Rosa Clará
Otros muchos diseñadores, como Elie Saab, Christian Dior, María Barros, Zac Posen, Roberto Cavalli, Valentino o la firma Lázaro, apuestan por este cambio y ya se han creado multitud de vestidos y accesorios en rosa.
Vestido de novia en rosa del diseñador Zac Posen
Vestido de novia diseñado por Lázaro