Para empezar Berlín y Sevilla. Más adelante, Barcelona, Córdoba, Lisboa y Pamplona. Estas son las paradas previstas por la cadena catalana AlmaHotels en su camino de consolidación de un tipo de hotelería boutique en contacto con las raíces clásicas y el lujo de porte señorial.
Ahí está su The Schlosshotel Im Grunewald, en la capital alemana. El de Sevilla, por su parte, disfruta de una ubicación más céntrica, a pocos pasos del barrio de Santa Cruz, concretamente en una vía antes transitada por carros y carruajes con destino al mercado de maíz.
Construido en los primeros años del siglo XVIII por don Manuel López Pintado, el primer marqués de Torreblanca de Aljarafe, el Palacio de Villapanés conserva el legado gótico pero también traslada al viajero a la época mudéjar.
En cualquier caso, deslizarse por el patio interior, rodeado de columnas de mármol que a su vez sostienen hileras de arcadas triples, ascender al torreón mirador para contemplar las vistas a la Catedral y la Giralda, o encerrarse en las alcobas, permite entender el equilibrio entre el clasicismo y el sabor andaluz, la sutil elegancia de unos espacios de revista que no caen ni en tópicos ni en faralaes.
Materiales nobles, bañeras junto a los balcones enrejados, exquisitas telas, detalles de confort, enormes puertas macizas, mobiliario contemporáneo, estampados conjuntados, buen gusto y referencias culturales. Cuartos de baño y dormitorios que destilan romanticismo.
Via: Notodohoteles