Cuando sentimos la necesidad de decorar o remodelar alguna estancia de la casa, lo primero en lo que pensamos es en el presupuesto. Pero si éste es limitado, la mejor solución es explotar las posibilidades que ofrece el baño sin gastar mucho dinero. La idea es conseguir «mucho con poco» o lo que es lo mismo, bonito y barato.

Primero hay que determinar qué aspectos del baño tienen preferencia y cuáles necesitan ser más trabajados para que el resultado sea un baño realmente renovado.

Respecto a las paredes, si tienen baldosas, limpiar bien las juntas y después las baldosas supondrá un cambio muy notable. De la misma manera, si no hay baldosas, pintar la pared (cambiar el color si es necesario) quitará años de encima al cuarto de baño.

Los muebles con la humedad se deterioran. Darles una capa de barniz hará que gocen de más brillo y mejor apariencia.

Un nuevo color. Es posible que al decorar el baño busquemos un cambio radical. Para ello, lo más eficaz es darle un nuevo color. Si al pintar la pared hemos aprovechado por un tono diferente, ahora podemos colocar también toallas en ese mismo color. Si, por el contrario, no podemos cambiar las baldosas, lo mejor es comprar algunas toallas en otro color que combine bien.

Accesorios renovados. Para ver el baño diferente, podemos incluir algunos cambios que resultan muy económicos y son muy útiles para nuestro propósito. Así, por ejemplo, el espejo, la cortina de la ducha, el vaso del cepillo de dientes o la jabonera pueden ser sustituidos por otros más modernos.

Otros detalles que podríamos añadir serían unas cestas vistosas, algún cuadro o simplemente un jarrón cuco con unas bonitas flores.

Cada detalle cuenta y no es necesario abarcar todas las opciones, sólo aquellas que consideremos más importantes y se ajusten a nuestro presupuesto. Poniendo en práctica estos pequeños cambios veremos que es posible decorar el baño y obtener un resultado satisfactorio con poco dinero.