CARTIER: LE STYLE ET L’HISTOIRE
Una retrospectiva sin precedentes organizada por la Réunion des Musées Nationaux en el Grand Palais de Paris, tuvo lugar hace unos meses para reconocer la importancia de Cartier en el mundo.
Cartier es, sin duda, uno de los principales nombres que llegan a nuestra mente cuando hablamos de relojes y joyas. La mundialmente reconocida marca francesa, desde 1847, sorprende gratamente a los que disfrutan del placer de lucir joyas de primera calidad. Pero es desde 1899, en la tercera generación de Cartier en rue de la Paix 13, que Louis Cartier sentó las bases de lo que sería el estilo de la maison.
Este estilo sutil mezcla de modernidad, elegancia e ingenio ha marcado su camino durante más de 100 años. La colección Cartier (desde 1983) ha sido presentada en 25 exposiciones, distribuidas en diversas instituciones culturales, a lo largo de todo el mundo como en el Museo Metropolitano de Nueva York, el Museo Británico de Londres, la Fundación Calouste Gulbenkian de Lisboa y el Palace Museum en la Ciudad Prohibida de Beijing.
Una colección compuesta por increíbles piezas de joyería (más de quinientas), relojería y objetos refinados como telas, litografías, ilustraciones y carteles surgidos de los talleres de la maison Cartier, que celebraron la historia de esta maison de excepción, fundada en 1847, a través de los diferentes estilos y épocas que supieron seducir a numerosas personalidades elegantes del siglo XX.
Eclipsada quizá por la fama de la firma y el esplendor de sus diamantes, la compleja historia de esta gran maison de joaillerie sigue sin conocerse del todo. Sin embargo, Cartier ha interpretado un papel muy importante en la historia de las artes decorativas francesas.
Sus creaciones, desde el clacisismo a las invenciones del estilo moderno y radical, entre la geometría y el exotismo, ofrecen un testimonio apasionante sobre la evolución del gusto y de los códigos sociales.