Una vivienda elemental, económica y bien ventilada, que disfruta de estos acontecimientos temporales y que se encierra como un cofre en el silencio de las ausencias…
La vivienda es austera con una materialidad cruda (ladrillos, cemento, piedras, madera), una estructura simplemente apoyada sobre muros sobre una plataforma en un suelo húmedo…
La reutilización de materiales (madera o encofrado de la estructura para cerramientos linderos y para el ingreso, los restos de cortes de piedras de la cantera para la plataforma blanca, o los muros sin juntas de cemento para potenciar la ventilación cruzada), hacen de esta vivienda un laboratorio interesante de experimentación material sin perder el respeto por la construcción tradicional.
La vivienda atrapa la sombra existente (árbol yvyra pyta), generando el espacio intermedio típico nuestro (agradable e integrador) y nos regala una terraza mirador al Rio Tebicuary.
Via @Archdaily