Paredes en tonos degradé o efecto ombré. Una nueva capa de pintura puede transformar cualquier habitación y más aún si se emplea una técnica tan novedosa como ésta. Un degradado de pared comienza con un color más intenso y lentamente se va convirtiendo en un color más tenue o más claro, tanto en horizontal como en vertical, de arriba a abajo o de derecha a izquierda, según el efecto que se quiera conseguir. Si se hace bien, el efecto es gradual y los límites entre colores no se notan.
vía: @psimadethis
PASOS A SEGUIR:
Elige un color, y compra 3 botes de pintura en los 3 tonos: claro, medio y oscuro que desees.
- Después, como siempre, pon cinta de carrocero en zócalos, puertas y ventanas para evitar que se manchen de pintura.
- Una vez acabado empezamos a pintar del tono más claro toda la pared con un rodillo y esperamos a que se seque. Es importante limpiar el rodillo siempre que terminemos una capa.
- Lo siguiente es pintar con el tono más oscuro la parte inferior.
- Mezclar el tono medio y el oscuro para crear el segundo tramo de la pared y pintar un trozo.
- Pinta la tercera sección con el color medio.
- Junta los colores usando una brocha pequeña hasta que las áreas se mezclen y espera hasta que esté seco.
- A lo mejor podrías necesitar darle un toque con algún tono mezclado, consiguiendo un increíble tono sombreado.
Elegir el color es crucial y una tarea difícil, especialmente cuando no se tiene nada claro, ya que de él va a depender en gran medida el ambiente que logremos crear. Con las siguientes imágenes esperamos facilitar esta elección.